jueves, 3 de junio de 2010

Vojtech Kubasta. Cristóbal Colón

Vojtech Kubasta (1914-1992).
Nació en Viena, pero después del fin de la Primera Guerra Mundial, cuando tenía cuatro años, se trasladó con sus padres a Praga. Allí vivió y trabajó hasta su muerte.Curiosamente estudió arquitectura, pero su pasión era la ilustración. Colaboró como ilustrador en más de treinta editoriales y mucha gente apreció su trabajo, la parte principal de su creación fueron los libros para niños, y desde entonces se dedicó a este campo del dibujo durante toda su vida. En los años cincuenta fue encargado por la Cámara de Comercio Checoslovaca de diseñar folletos publicitarios para las más destacadas empresas de aquella época como Tesla, Pilsner Urquell y Koh-i-Noor. Allí fue donde nació la idea de crear los libros desplegables, es decir los pop-up. Sabía que los libros que se mueven, y de los cuales se despliegan los personajes y los edificios, son mucho más atractivos para los niños. Y era sobre a ellos a quienes dedicaba sus dibujos y sus historias. Le hacía feliz el saber que los niños en el mundo entero podrían jugar con sus libros. Por lo visto estaba muy satisfecho de los Pop-up de las naves de Cristóbal Colón, son de los más apreciados de toda su obra; en Japón utilizaban la flota de Colón como utensilio en las escuelas.
Cómo muchos sabéis, soy coleccionista de libros Pop-up. Si bien es cierto que es muy fácil y económico conseguir reediciones, muchas veces no lo es tanto hacerse con los originales y mucho menos a buen precio. Por todos esos motivos, reconozco que ha sido una locura desmontar varios de mis Kubastas originales para miniaturizarlos. A veces cuando el bisturí pasaba cerca de la hoja tenía el corazón en un puño…… pero, todo sea por esta maravillosa forma de arte!!!!! Os informo de que mi Kubasta no sufrió grandes desperfectos y después de la restauración sigue luciendo igual de bello.
El facsímil en miniatura tiene unas medidas de 2,7cm alto X 1,9cm ancho y 2mm de lomo. Sí, sí, plegado su interior y cerrado el cuento solo ocupa 2mm de grosor. Esto ha sido posible gracias al poco gramaje del papel, aunque añade la dificultad al troquelar los espacios entre las velas del barco. Por cierto, las velas cuentan con unas pequeñas cuerdas (creo que se llaman jarcias, pero no estoy segura). En la portada podréis observar que el timón es giratorio , con lo que va dejando al descubierto partes del mapa para ir a buscar el tesoro!!!!!
Me despido de vosotros cantando la canción del pirata de Espronceda:
Con diez cañones por banda,
viento en popa, a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
un velero bergantín.